Oportunidad para transformar la cultura organizacional: NOM-035

Oportunidad para transformar la cultura organizacional: NOM-035

La aplicación de la Norma permite generar un vínculo más estrecho con los equipos de trabajo. Y es en este contexto de crisis por pandemia, cuando otros efectos psicosociales han cobrado gran relevancia: escuchar a las personas y conocer sus necesidades puede hacer la diferencia entre asegurar o no la continuidad de las empresas.

 

En un contexto de crisis por pandemia, donde el bienestar psicosocial de los colaboradores cobra mayor relevancia, la aplicación de la NOM-035 presenta la oportunidad para llevar a cabo un cambio cultural dentro de las empresas, que promueva la productividad, el equilibrio entre vida y trabajo y la certidumbre laboral. No hacerlo, pone en riesgo a las organizaciones, pudiendo llegar a perder competitividad y continuidad.

La NOM-035 tiene un carácter de obligatoriedad: rige en todo el territorio nacional y aplica en todos los centros de trabajo –así lo dice la misma norma–. Sin embargo, identificar y analizar los factores de riesgo psicosocial en el entorno laboral era ya una tendencia mundial. En este sentido, las empresas mexicanas tienen cierto rezago: según la Organización Mundial de la Salud (OMS), somos uno de los países que sufre mayor estrés en el trabajo.

La crisis por pandemia, entre otros muchos aspectos, también hizo que surgieran nuevos riesgos psicosociales. Hoy, los colaboradores –como prácticamente toda la sociedad– tienen incertidumbre sobre cuándo terminará la pandemia, cuándo podrán salir de casa, temen por su salud y la de su familia, están preocupados por el regreso a las oficinas y por el riesgo de contagio en el transporte público, entre otros. Además, para muchos se ha borrado la frontera entre vida personal y trabajo.

Este escenario puede llegar a provocar pérdida de productividad. Los equipos pierden estabilidad, entusiasmo e, incluso, la creatividad puede disminuir al no existir una colaboración cara a cara con nuestros colegas de trabajo. No obstante, la aplicación de la NOM-035 es una gran oportunidad para que las empresas incrementen la comunicación con los colaboradores, sean más transparentes y no generen expectativas erróneas.

Es importante mencionar que el cumplimiento de la Norma no debiera quedar solo en la aplicación de cuestionarios que la misma incluye y en tratar de corregir de manera somera los efectos psicosociales que se hayan detectado en las empresas. Se trata de generar un cambio cultural, de medir la efectividad de este y el compromiso de los colaboradores con la marca, así como lograr inclusión y transmitir el sentimiento de preocupación.

Entre otros beneficios, esto permitirá reducir la rotación –enemigo silencioso de las organizaciones que genera enormes pérdidas financieras, resta productividad y competitividad–. También se logra mayor compromiso con los trabajadores, mayor enfoque en sus actividades, se mejora el ambiente laboral y se reducen los problemas legales. Alcanzar un mejor ambiente laboral, en este momento, incluso permitirá desarrollar mejores líderes.

Conseguir la transformación implica objetividad, además de visiones y opiniones diversas que enriquecen el proceso. Se requieren profesionales externos con múltiples experiencias, que eliminen la inercia que naturalmente puede provenir de la misma organización. Y es que estos profesionales pueden realizar un diagnóstico objetivo, revisar las políticas existentes, lo mismo que procedimientos y manuales. También pueden diseñar nuevas políticas, programas para mitigar riesgos, programas de sensibilización y capacitación; medir la efectividad de los cambios y darle seguimiento a la implementación y cumplimiento de la Norma.

Las organizaciones que logren comprender que este es uno de los momentos más desafiantes para sus equipos a nivel personal y laboral, y procuren el acercamiento y la comprensión con las personas, asegurarán su permanencia y la obtención del compromiso de sus colaboradores.

Fuente: Forbes